¿Por qué la pintura epoxi calea en exteriores?

La pintura epoxi es uno de los recubrimientos más utilizados en entornos industriales y técnicos por su alta resistencia mecánica, adherencia y durabilidad. Pero, a pesar de sus ventajas, no está pensada para resistir la intemperie. Cuando se aplica al exterior sin protección, puede aparecer un fenómeno muy habitual: el caleo.


¿Qué es “calear”?

Calear es un término técnico que describe la aparición de un polvillo blanco sobre la superficie pintada, similar a tiza, que se desprende al pasar la mano. Este efecto se debe a la degradación de la película de pintura por causas externas, especialmente por radiación solar y agentes atmosféricos.


¿Por qué ocurre esto en el epoxi?

1. Falta de resistencia a los rayos UV

Las resinas epoxi no están diseñadas para aguantar la radiación solar directa. Los rayos ultravioleta:

  • Rompen las cadenas del polímero.
  • Deterioran el aglutinante que une los pigmentos.
  • Dejan la superficie pulverulenta, mate y degradada.

2. Condiciones térmicas extremas

En exteriores, los cambios de temperatura provocan dilataciones y contracciones del soporte. Como el epoxi tiene una estructura rígida, estas tensiones lo afectan y debilitan aún más.

3. Humedad y exposición prolongada

Aunque el epoxi resiste bien ciertos productos químicos, la exposición continua a humedad, rocío o lluvia puede facilitar la degradación superficial si no está bien protegido.


✅ ¿Cómo evitar que el epoxi calee?

Si necesitas aplicar epoxi en exteriores, sigue estos consejos:

  • Nunca lo dejes como capa final al sol.
  • Protege el sistema con una capa de acabado resistente a rayos UV, como:
    • Poliuretano alifático.
    • Pintura poliaspártica.
  • Utiliza sistemas formulados específicamente para exteriores.

🧑‍🎨 ¿Y si ya ha caleado?

Si tu pintura epoxi ya muestra signos de caleo:

  1. Limpia bien la superficie eliminando todo el polvillo.
  2. Lija suavemente si es necesario.
  3. Aplica un acabado adecuado para exteriores, siempre que la base esté firme.

La pintura epoxi es una excelente aliada para muchos trabajos técnicos e industriales, pero su uso al exterior requiere precaución. Si la aplicas sin protección, el sol acabará por degradarla. Conocer sus límites y acompañarla del acabado adecuado evitará problemas como el caleo, alargando la vida útil del recubrimiento.